29 jul 2009

¡Yazmín Te Amo!

¡CERRADO!

Still Loving You.







Tiempo, nesesito tiempo
para ganar otra vez tu amor
yo estare alli, yo estare alli
amor solo amor
puede devolverme tu amor algun dia
yo estare alli, yo estare alli
Lucha, nena luchare
para ganar otra vez tu amor
yo estare alli, yo estare alli
amor tu amor puede
romperse las paredes algun dia
yo estare alli, to estare alli.
si fueramos otra vez
por el camino del principio
yo intentaria cambiat
las cosas que mataron nuestro amor
tu orgullo es como una pared tan fuerte
que yo no puedo pasar
no hay ninguna oportunidad para comenzar otra vez
yo te amo
intenta, intentalo nena
copnfia ottra vez en mi amor
yo estare alli, yo estare alli
amor, tu amor
no deve ser tirado lejos
yo estare alli, yo estare alli
si fueramos otra vez
por el camino del principio
yo intentaria cambiar
las cosas que mataron nuestro amor
tu orgullo es como una pared tan fuerte
que yo no puedo pasar
no hay ninguna oportunidad
para comenzar otra vez
si, yo he herido tu orgullo
y yo se que tu has desidido terminar
deves darme otra oportunidad
este no puede ser el fin
aun te sigo amando
aun te sigo amando
nesecito tu amor
aun te sigo amando
aun te sigo amando nena

Somos Lo que Fue. (Parte II)



Tal vez es un error hoy de mi parte el aferrarme a esto tan bonito, pero no soy capaz ni de enfrentarte y decirte que yo a ti te necesito. Tal vez estoy poniéndote en las manos el arma con que puedes acabarme, pero si igual da el mundo un día nos vamos… tu amor o tu desprecio he de llevarme.

La función casi comenzaba, así que fuimos a hacer las “Compras previas”.

En la fila solo la veía, y no pude más, la abrasé.

Después de las compras ella fue a baño, yo esperé en la mesa que ya con todo lo sucedido figuraba una sala de espera de algún consultorio psiquiátrico. Mil cosas pasaban por mi mente, estaríamos en las ala sabiendo que estamos al lado uno del otro no estaríamos juntos.

Llagó y nos encaminamos a la sala. Una vez dentro ella escogió los lugares (fue una suerte encontrar dos asientos vacios juntos). ¡NO!, a pesar de todo no dejaría que esta cita se tornara mas vacía de lo que ya estaba, no dejaría que el ambiente se tornara tétrico. La abrasé, ella a mí, la tomé de la mano, ella también sujetó la mía. Y así en el inmenso vacio triste de mi soledad ella dio una llama a mi hoguera de esperanza, aun no era el momento, pero ya llegaría.

No dijimos nada, algunos comentarios sobre la película y sobre las chicas escandalosas que se habían sentado detrás de nosotros.

Juntos, amándonos en silencio, separados por una muralla de orgullo e incertidumbre, pero amándonos como antes lo hacíamos.

Así estuvimos la mayor parte de la película. Diría que eso no estaba matándome pero eso no es cierto, me había vuelto el fantasma eterno que habita en su recuerdo. Y así lo que un día fue ya no es, maldita mi suerte de solo en mis sueños verte, de amarte… de amarte y perderte.

Mis labios suplicaban por los suyos. Y de pronto, nada, silencio, sus latidos eran uno junto con los míos, nuestras miradas se cruzaron, ambas suplicaban por lo mismo, y entonces sucedió… la besé.

La besé como si nunca jamás lo hubiera hecho en la vida, con ternura. La bese como si ese fuera el último beso que nos daríamos por siempre, con desesperación. La besé como si no pudiera vivir sin ella, sin ese beso, como reclamando su corazón que me perteneciera hace tiempo. La besé y me besó de igual modo, aunque más reservada, contestó mi beso con cierta timidez, pero sus labios quemaban de amor y pasión. Nos estábamos ahogando sin ese amor que aun queremos pero que escondemos.

No dijimos nada, fue corto pero hermoso, y a mi mente evocaron las palabras de Neruda: “Es tan coroto el amor y es tan largo el olvido”. Terminó la película y nos fuimos.

La dejé en su casa, y mis labios suplicaban por los suyos nuevamente, pero ella… simplemente no lo hizo, y una lágrima rodó por mi mejilla… llegando a mis labios cual premio de consolación.
Y me retiré sin mirar atrás, con las manos en los bolsillos, lloraba y no dejaba de repetirme: “somos lo que fue”:

Somos Lo que Fue.

Son exactamente las 11:11 p.m. del 16 de Julio del 2009. No puedo dormir. Es extraño lo que me pasó hoy, no sé que sentir, dolor, melancolía, esperanza, alegría… no sé.
Hoy era el estreno de la quinta película de Harry Potter (así que era un día especial), la invité, por supuesto, y esta es la historia:
El día de ayer quedé de pasar por ella a las 11:00 a.m. (otra vez el numero 11, que curioso, ¿no?) no podía llegar tarde si quería recuperarla, además siempre me ha gustado ser puntual. Llegué exactamente a las 10:41 a.m. (¿Es muy temprano?); entré a su casa, sería raro que su hermanito no me recibiera con un golpe, y así fue. Su madre no estaba, yo como de costumbre tomé asiento (en el sillón predilecto). Ya sería raro que su hermano no me golpeara, no jugara a “matarme” como de costumbre, y así fue. Poco después llegó su mamá, y después de saludarla, y (poco después) despedirme. Salimos con rumbo al cine, tomamos un taxi y todo el camino fuimos bromeando… riéndonos, fue lindo (igual que ella), fue largo el camino, pero al final llegamos “a tiempo”.

El cine estaba súper lleno, ya no había boletos para la función de las 12 y 12:20, y la función más próxima era a la 1, tuvimos que conformarnos con ese horario, así que compramos los boletos y nos sentamos en una de las bancas blancas de galerías.

Ella hablaba, yo la contemplaba, miraba en sus ojos la pureza de su inocente alma y en su rostro la hermosura de su ser. Ella hablaba, yo solo la contemplaba, y me enamoraba una y otra vez, más y más.

Ese día yo iba con la intención de pedirle que regresara con migo, pero algo me lo impedía, algo me decía que no era el momento indicado para eso.

Y la observaba allí guardando silencio, tragándome mi tristeza por mi incapacidad de pedirle que lo volviéramos a intentar. ¡Tristeza!, como siempre, en todo estás tú…

-Estás bien?

-Si, es solo que tengo un poco de sueño.

No era cierto. Me recosté sobre sus piernas y con los ojos cerrados lloraba en mi interior. ¡Tan cerca y a la vez tan lejos! Ella acariciaba mi cabello, ignorando (tal vez) mi sentimiento. Esa escena me hizo recordar aquellas veces que ella quedaba dormida recostada en mis piernas, y yo… solo la contemplaba, enamorado.

-¿Qué te pasa?

-Está bien, te diré la verdad. Hoy venia con intenciones de pedirte que regresaras con migo (ella movió la cabeza en señal de desaprovación) pero algo me dice que no es el momento.

-No, no lo es. Aun no me lo pidas. Si no estás seguro entonces NO.

No sabía que sentir. Me sentí mal porque yo quería volver con ella y ser felices de nuevo, pero me sentí bien porque ella, al igual que yo, sabía que no era el momento de regresar, de pedírselo.

Te amo y no me voy a marchar, no me voy a alejar sin antes decirte que lloro, que sufro al mirarte tan cerca a mis brazos… sin poder abrazarte. Y mis labios, sedientos de los tuyos, mueren de impotencia.

Eres.

Eres lo que mas quiero en este mundo, eso eres, mi pensamiento mas profundo, también eres, tan sólo dime lo que hago, aquí me tienes. Eres cuando despierto lo primero, eso eres, lo que a mi vida le hace falta si no vienes, lo único, preciosa, que mi mente habita hoy. Qué mas puedo decirte, tal vez puedo mentirte sin razón, pero lo que hoy siento es que sin ti estoy muerto, pues eres lo que mas quiero en este mundo, eso eres. Eres el tiempo que comparto, eso eres, lo que la gente promete cuando se quiere mi salvación, mi esperanza y mi fe. Soy el que quererte quiere como nadie soy, el que te llevaría el sustento día a día, dá a día, el que por ti daría la vida, ese soy. Aquí estoy a tu lado y espero aquí sentado hasta el final. No te has imaginado lo que por ti he esperado pues eres lo que yo amo en este mundo, eso eres, cada minuto en lo que pienso, eso eres, lo que más cuido en este mundo, eso eres.

Travesía A La UNILA.

Lo que se hace por amor, ¡caray!

La vería en la UNILA, le recogería en su escuela, y de ahí nos iríamos al centro, tal vez por un café, y después iría a dejarla a su casa. Sería perfecto.

Llevábamos planeándolo cerca de una semana.

¡Qué romántico!, el novio iría por su novia a su colegio, vería, tal vez, a sus compañeros, a sus amigas y me presentaría como “su novio”. El beso de llegada, por supuesto. Nos iríamos riendo todo el camino, contándonos como nos había ido en el día. Sería fabuloso.

Y por fin el día esperado llegó.

Yo salía de bachilleres cerca de las 12:00 p.m. (a las 11:50 a.m. para ser exactos). Tenía tiempo suficiente para tomar 3 rutas, o las que fueran necesarias, para llegar a la UNILA.

No me demoré un segundo, tan pronto salí abordé la ruta 8 con rumbo al centro. Todo iba bien, llevaba mi iPod así que iba escuchando música durante el camino.

Para ser honestos no sabía bien donde quedaba la UNILA, jamás había ido yo solo. Sabía que una amiga estudiaba allí, pero jamás había ido por ella. Así que me “informé” con mis amigos (con una amiga para ser exacta… mi ex novia ¬_¬)

-“La UNILA, que yo sepa, está cerca de Teopanzolco.”

Rayos, sabía que tenía que transbordar, que la escuela quedaba al lado de una autopista, pero no estaba seguro de que eso fuera verdad… o fuera mentira. Además semanas atrás pasamos cerca de allí y ella dijo que si seguía recta esa calle por la que íbamos se llagaba a su escuela.

Cerca del cantarranas ya nos sabia que hacer, estaba cerca de Teopanzolco, pero ¿si no era allí?

Decidí bajar de la ruta y caminar a Teopanzolco. Al parecer mis cálculos fallaron, tal vez en auto estaba cerca, ¡Pero no a pie!

A duras penas llegué a Teopanzolco. Pero maldita sorpresa; efectivamente había una universidad ahí , pero era la ULA (Universidad Latino Americana).

¡Rayos!, ahora a llamarla. No tenia crédito (¡Genial!) así que tuve que buscar un teléfono público, lo encontré cerca del Auditorio Teopanzolco. La llamé pero… ¡valla suerte! Estaba en clase, dijo que me llamaba en 5 minutos. –Ok- dije. No tenía a donde ir, conocía el lugar y a donde podía ir, pero ignoraba que tan lejos o que tan cerca estaba del colegio.

Caminé sin rumbo fijo por 5 minutos, esperando su llamada, al poco rato llegó un mensaje:

“Lo siento, no puedo llamar, camina a Plaza Cuernavaca y toma una ruta que diga GOBERNADORES y le pides que te baje en la UNILA, está cerca de Mambo Café, en frente del Mercedes Benz. Suerte, TKM”.

¡Rayos!, la caminata de 5 minutos fue muy bien aprovechada en celeridad, ya que había llegado al Melchor Ocampo y ahora a regresarme hacia Plaza Cuernavaca. Total, después de un rato llegué al lugar, pero ¡Oh, sorpresa! Estuve cerca de 20 minutos allí y la maldita ruta no pasaba… ¡Ninguna!

Ok, me serené un poco y al parecer Dios se apiado de mí en ese momento, porque llegó una ruta que decía GOBERNADORES.

- Va a la UNILA?
- Si
- Me deja allí, porfavor.

Y así me fui con rumbo a la “escuela prometida”.
Todo iba bien, decidí checar el mansaje que me mandó por si las dudas y leí “… está cerca de Mambo Café…” y justo en ese momento pasábamos por Mambo Café y creí que ya me había pasado (¬_¬) así que me bajé. Regresé a Mambo Café y no había nada… ¡Demonios!, había bajado antes. Caminé un largo tramo hasta que vi el letrero de Mercedes Benz, al fin… ¡Había llegado!

Y después de todo, a pesar de las tonterías y contra tiempos todo fue como esperaba: el Beso de bienvenida, las presentaciones, las risas en el camino… el día entero.
¡Lo que se hace por amor!... ¡Caray!

Bresso.

Mi último cigarrillo entra a mi pulmón.
Mis palabras tiemblan hacia ti,
Llenas de esperanza y temor.
Aquí sentado, cuan purificado me ves,
Sin amor - vacío y enfermo,
Desangrado - totalmente agotado.
Sin embargo tu amor corre por mis venas.

No estoy muerto - no - no estoy muerto.
No estoy muerto - no - no estoy muerto.

Aún escucho tu voz hablarme,
Aún siento tus labios sobre mi piel.
Aún tu luz brilla en mí,
Aún te amo.

Todavía - Todavía - Todavía.

Aún quiero conocerte.
Quiero acercarme a tu alma,
Quiero perderme completamente en tí.
Toda tu belleza, todo tu brillo.
El castigo por amarte, el castigo de mi amor.
Y ahora te pregunto:

¿Dónde estas?
¿Dónde estas?
¿Dónde estas?
¿Dónde estás ahora?
La esperanza se aplasta en mi piel.
La duda se encierra en mi corazón.
Siento amor en mi interior.
Mentiras y fuertes palabras escucho de ti,
El reloj de mi vida - destruido.
El recuerdo condena,
Y te amé.
Aún escucho tu voz que me llama,
Aún siento tus labios sobre mi piel,
Aún brilla tu luz en mí,
Todavía te amo.

Por favor - Por favor regresa.
Por favor - Por favor regresa.
Todavía te amo.

¡Todavía! - ¡Todavía! - Por favor, Por favor regresa.
¡Todavía! - ¡Todavía! - Por favor, Por favor regresa.
¡Todavía! - ¡Todavía! - Por favor, Por favor regresa.

¡Por favor!, Por favor regresa.
¡Por favor!, Por favor regresa.
Por favor...

Sin Ti... Sin Mi.

¿Que hace el sexo en Internet
el pudor en la vedette
que hace un Porsche en Tel Aviv?
¿un pigmeo en un iglú
una duda en un gurú
que hace Frida sin sufrir?

Si así como quién no quiere la cosa
más fácil dispara rosas un misil,
que tú un quizás.
quien me manda a ser adicto de tus besos
si la luna no es de queso, ni tu boca souvenir.

¿Que hace un casto en un motel,
que hace un genio en un cuartel
y que estas haciendo tu, sin mi?

¿Que estas haciendo tú,
que estoy haciendo yo?
subastando en el mercado
besos tan improvisados
con despecho al portador.

¿Que estas haciendo tu,
que estoy haciendo yo?
malgastando en cualquier cama
lo que se nos de la gana
pa' vengarnos de los dos.

¿Que hace un lunes en verano
un judío sin paisanos?
¿y que estoy haciendo yo,
sin ti...?

¿Que hace un hippie en la oficina
una orca en la piscina
una monja en carnaval?
¿que haces tu cuando estas sola
chapuceándote en las olas
de un pasado que paso?

¿Que hago yo cuando el domingo es por la tarde
y el campeón se hace cobarde y pregunta donde estas?
ya no estoy para los versos de Neruda
si en mi cama no figura ni un buen beso de alquiler

¿Que hace el Louvre sin Mona Lisa
un nudista con camisa
y que estoy haciendo yo sin tí?
¿Que estas haciendo tú,
que estoy haciendo yo?
subastando en el mercado
besos tan improvisados
con despecho al portador.

¿Que estas haciendo tu,
que estoy haciendo yo?
malgastando en cualquier camal
o que se nos de la gana
pa' vengarnos de los dos.

Que hace un 30 de febrero
que hace un rey sin heredero
y que estoy haciendo yo... sin ti.